Este blog desea servir de vehículo de encuentro y de divulgación de los mitos latinoamericanos, para contribuir a que los antiguos personajes y situaciones simbólicas arquetípicas se contacten de nuevo con nuestras conciencias, despertando esa antigua habilidad que tenían nuestros antepasados de leerlas intuitivamente y de servirse de ellas como alimento espiritual. Para contextualizar el tema recomendamos iniciar con las lecturas de Pueblos indígenas en Latinoamérica, Pueblos indígenas en Colombia, Sentir Indígena, Definición de Mito,Consecuencias de olvidar los mitos, Mitos en Latinoamérica, Formas del Mito y Mitos de Creación. En estos últimos se desea hacer un especial énfasis.


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miércoles, 14 de noviembre de 2012

Colombia - Mito Chimila - El mundo

Los Chimilas o Ette ennaka ('gente propia') es un pueblo amerindio que desde 1990 vive congregado en el resguardo Issa Oristunna (Tierra de la Nueva Esperanza), San Angel, municipio de Ariguaní, departamento del Magdalena, Colombia. Este relato está tomado de El sol babea jugo de piña en el que el autor Miguel Rocha Vivas compila mitos de los departamentos de Atlántico, Magdalena y Serranía del Perijá. La obra hace parte de la Biblioteca básica de los pueblos indígenas de Colombia, del Ministerio de Cultura. La narración es la siguiente y quien narra es Carlos Sánchez Purusu:  

Yunari Kraari es nuestra madre
Ella está en el principio
Está antes que Sol y Luna
Ella es la abuela de Yaau y Numirinta.
Como es una anciana le decimos Yunari
Como es extensa le decimos Kraari
Es tan ancha como la misma Tierra
Yunari es la misma Tierra
Los arroyos son sus venas y las aguas son su sangre
En su espalda y en su pecho están los ette
Sobre Yunari los ette viven.
Yunari está en la Tierra del Medio
Ella es la Tierra del Medio
Arriba hay cielo y abajo hay agua
En ambos lados vive gente
Por eso decimos que los ette viven en el medio.
Ahora la espalda de Yunari está limpia
Antes estaba sucia y llena de sangre
Yaau la limpió con agua y con fuego
La dejó sin manchas, nueva, joven.
Los ette de ahora son gente nueva
Son una nueva generación
Acabaron de bajar
Son los ette takke.
Cinco Tierras tenían que bajar
Quedó faltando una
Estamos en la cuarta Tierra
Las otras tres ya vinieron y se acabaron
Eran las tierras de los antiguos, de los dueños de los huesos y las
múcuras
nadie sabe cómo eran porque nadie las ha visto
Nadie las ha visto porque ya pasaron
Yaau las barrió con agua, con fuego y con barro.
La quinta Tierra está en el cielo, está esperando venir
Desde aquí se ven estrellas, pero allá vive gente
Allá hay montañas y ríos y hay waacha y ette
Hay casas y ciudades y hay otros yaau.
Cuando aquí es de día allá es de noche
Cuando aquí es de noche allá es de día
Es al revés
Cada vez que vemos una estrella fugaz, allá arriba hay una culebra
Lo mismo cuando se oyen animales en la noche
Los ruidos son porque arriba están cazando ñeque.
A veces se abren unas puertas en el cielo y la gente se asoma
«Queremos bajar, ya es nuestro turno», dicen
Cuando ellos bajen el mundo de ahora se acabará
No volverá a haber violencia y muerte
Esa es la quinta y última Tierra.
Abajo está la Tierra de Abajo
Allí también hay montañas, casas y personas
Pero todo es diferente
Es un mundo oscuro y de agua
Hay muchas fieras que a veces se asoman por los nacederos de
agua
No queda en el fondo del mar sino debajo del mar
Después de ella no hay nada.
La Tierra de Abajo sostiene a la del Medio
La del Medio sostiene a la de Arriba
La Tierra de Abajo nos ve a nosotros como nosotros vemos a la
Tierra de Arriba.
Donde se acaba la Tierra hay cuatro horcones

Están más allá del Magdalena y del Ariguaní.
Ellos sostienen el cielo
Como cuando los horcones de una casa sostienen el techo
Nuestra tierra es como una casa pero más grande
Parecen horcones pero en verdad son hombres, son ette.
Los ette sostienen la Tierra
Los ette hacen esto con su pensamiento
Cuando el último de los ette haya muerto, ese día todo se acabará
Cuando los ette se acaben la Tierra de Arriba bajará.

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